El nuevo contralor de la República, Nelson Shack, afirmó este martes en exclusiva para RPP que hay dos ejes fundamentales en su trabajo: «la moralización profunda que permita recuperar la legitimidad de la Contraloría y coadyuvar a la mejora de las instituciones públicas a través de la modernización del sistema de control». Esta última es una necesidad debido al poco alcance que tiene su institución en el Perú.
«Hay más de 2,500 instituciones públicas en todo el país y hay menos de 912, eso quiere decir que hay casi las dos terceras partes de las instituciones que no tienen oficinas de control», comentó. «Es lo que más le afecta al pueblo y la gente ve que algunas autoridades se hacen ricas y no hay control».
Me debo al pueblo. Shack señaló que los hechos van a demostrar, a corto plazo, su independencia con respecto al Ejecutivo y a los que lo han elegido, es decir el Congreso de mayoría fujimorista.
«Si antes nunca fui presionable, ahora menos», dejó en claro. Además, en cuanto a la modernización de su institución dijo que «la Contraloría necesita profesionalizarse y requiere una introducción masiva de tecnología de información y comunicaciones que le permita ser más eficiente y menos invasiva».