Pablo pasó intensamente por el feeling, aquella estación de la canción cubana que el malhumorado Guillermo Cabrera Infante llamaba “bobería amelcochada” y que fue (salvando las distancias con la exageración del autor de “Tres Tristes Tigres”), una muy valiosa incursión en los predios del bolero mucho antes que Luis Miguel lo trajera al gran público desde el pop
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Pablo Milanés ha sido probablemente el cantor más versátil y popular de la Nueva Trova Cubana. Además de canciones propias de amor y de las otras aplaudidas por sus seguidores, tuvo la virtud interpretativa de apoderarse de las de colegas autores, como Eduardo Ramos (“Siempre te vas en la tardes”) y de Nicolás Guillén* (“Canción”, por casi todos conocida como “De qué callada manera”).
Con estilo reconocible a leguas, fue uno de los personajes más pirateados en los 80 en las universidades, cuando reinaba el casete. Así que cuando llegó a Lima, por primera vez, tenía que ser acontecimiento. Como lo fue que cantara gratuitamente para los estudiantes de la Universidad Católica.
Pero estas líneas no pretenden ser recuento de las veces que visitó Perú.
II
Pablo pasó intensamente por el feeling, aquella estación de la canción cubana que el malhumorado Guillermo Cabrera Infante llamaba “bobería amelcochada” y que fue (salvando las distancias con la exageración del autor de “Tres Tristes Tigres”), una muy valiosa incursión en los predios del bolero mucho antes que Luis Miguel lo trajera al gran público desde el pop. Y decimos VALIOSA porque entre la intelectualidad de la época existía la tendencia a bajarle la llanta a las canciones populares de letras ligadas a lo sentimental. Milanés nadaba a sus anchas en diferente registros emotivos de la canción. Pero este es otro rollo.
A propósito del bolero, recomendamos el recital de Pablo: “Boleros en Tropicana”, que es joya con su interpretación en el arte de apoderarse de canciones de otros: parecían canciones nuevas, hechas para él.
III
El nombre del trovador cubano asomó para muchos peruanos por primera vez en los iniciales 80, cuando entró fuerte la canción “Homenaje”, en versión salsera del español Caco Senante https://cutt.ly/H1TGsI5 y que tenía en los coros a Rubén Blades, con quien el trovador cubano tendría agria controversia.
IV
Pablo parecía serio. Pero se entusiasmaba al hablar de música y dibujaba su enorme sonrisa, en punto de bohemia. Lo comprobamos varias veces cuando lo abordamos por las versiones que los salseros hacían de sus canciones. “No sabía que mis canciones podían tener un tratamiento así, tan bonito, como el que le pone Papo Lucca, por ejemplo…”, nos dijo. Se refería a “El tiempo, el implacable, el que pasó” https://cutt.ly/w1TF9DJ. Desde luego que La Sonora Ponceña le grabó más. Grande, Papo Lucca. Prefirió versionar varias veces a Milanés que sumarse a la moda de la salsa erótica.
V
En otra ocasión, Pablo destacó su gratitud hacia El Gran Combo de Puerto Rico. El mismo Rafael Ithier, comandante en jefe de Los Mulatos del Sabor, nos confirmó cómo gustó a “Pablito” la versión que hizo de “Años” https://cutt.ly/z1TFPcL
VI
Hay más versiones de “salseros” en este apurado apunte sin vocación exhaustiva. Por ejemplo, Roberto Roena y su Apollo Sound llevó a su estilo “La vida no vale nada” https://cutt.ly/y1TFoko y “Son para un festival” https://cutt.ly/b1TFjf5
Hasta la salsa romántica acogió al cubano y tiene en voz de Tony Vega uno de sus clásicos: “Yo me quedo”.
VII
Volvamos a Cuba, donde Pablo grabó “Proposiciones”, con Juan Formell, Mayito Rivera y Los Van Van, la banda insignia de la mayor de las Antillas: https://cutt.ly/n1TDGfK )
Pero soberana es la versión que le grabó Issac Delgado: “Son de Cuba a Puerto Rico” https://cutt.ly/Z1TGR3m
VIII BOLERAZO (los comentarios sobran)
Convergencia. Canta Pablo con Miguelito Cuní.
Convergencia. Pablo con el pianista Emiliano Salvador
IX
Enamorado del son y su poesía (con la que vistió varias de sus canciones), del bolero y de la canción popular, Pablo aplaudió las versiones que Gilberto santa Rosa hizo de varias de sus obras, especialmente de “Para vivir” https://cutt.ly/G1TS2Ig
X
En años recientes, aceptó grabar “La torre de marfil” de Chabuca Granda para el disco peruano “A Chabuca 2”, con arreglo de Lito Vitale. Joya también. Ojalá más canciones peruanas fueran grabadas así. https://cutt.ly/n1TDcDw
Este apurado apunte no tiene pretensiones de recuento, insistimos. Apenas recordar otras facetas del desaparecido trovador. Porque, disquisiciones aparte, Pablo Milalés era el del feeling. Y también el del sentimiento.
EN EL TINTERO:
A.- Uno de sus primeros discos estuvo dedicado a cantar al llamado Poeta Nacional de Cuba Nicolás Guillén. Aunque no en su faceta sonera y afrocubana. ¿Se podía musicalizar a don Nicolás o la poesía de este ya nació musicalizada?
B.- Milanés obtuvo el Grammy Latino por el disco “A.M – P.M. «Líneas Paralelas» que grabó con el eterno Niño de Trastalleres Andy Montañez.
C.- AURORA
Canción atribuida al cubano Manuel Corona y por los peruanos al poeta tacneño Federico Barreto. Disfruten esta versión a dúo con Celina González, quien reinara en los barrios populares junto a Reulitio Domínguez https://cutt.ly/y1YI9sn
D.- VERDAD AMARGA. Bolerazo de Consuelo Velásquez.
Agustín Pérez Aldave
Director de Imagen, Prensa y Cultura
APDAYC